La historia de Kimberly
Hola soy Kimberly, tengo 11 años y quiero contarte una historia que comenzó hace casi 6 años en el distrito de Cerro Colorado – Arequipa, en mi escuela Villa Magisterial. Mis papás y yo nos habíamos mudado a la asociación del mismo nombre, por ello tenía que entrar a un nuevo colegio. El primer día de clases fue muy especial porque estaba súper nerviosa pensando en que haría en mi nueva escuela, que por cierto era bastante pequeña en ese entonces.
Llegué de la mano de mi mamá quien me aconsejó hiciera amigos y que me sintiera segura pues vivíamos cerca y cualquier cosa ella podría venir a verme. Me acerqué a la pequeña aula en donde estaba primer grado y en la puerta me esperaba una señorita con una sonrisa muy cálida, se le veía muy amistosa y me recibió con un fuerte abrazo, era mi profesora Flor. Ella nos enseñó a sumar, restar, a leer y a escribir, cuan alegre me siento de la paciencia que nos tuvo a mí y a mis compañeros, en las muchas veces que decíamos que no podíamos hacer algo, para darnos ánimos de volverlo a internar. Nuestra profesora Flor, hablaba mucho con nuestros papás, les explicaba las cosas en las que nos debían apoyar en casa y como ellos también podían enseñarnos más cosas. Sabíamos que nuestra profesora Flor no se quedaría para siempre con nosotros, pues ella era parte de Enseña Perú, una organización que convoca a todos los profesionales que deseen apoyar a que niños como yo podamos tener acceso a la educación y ser mejores personas.
En 3er grado, sabíamos que la profesora Flor ya no sería nuestra maestra, estábamos muy ansiosos de saber quién vendría ese 2014, es así que llegó la profesora Silvana, ella es una persona muy cariñosa y amable, nos llevó a varios lugares a visitar, así como la profesora Flor. Entendimos que no todos aprendemos igual, pues teníamos un compañero que tenía 12 años pero estaba en nuestro grado y no por eso debíamos separarlo de nuestro grupo sino más bien apoyarlo. Aprendimos también sobre temas relacionados con el dinero, la profesora Silvana nos enseñó que si teníamos billetes rotos podríamos cambiarlos en cualquier banco y que debemos saber diferenciar entre nuestros deseos y necesidades, todo eso lo contamos en el día del logro del 2015 a todo el colegio. Así como comenzamos a identificar que éramos la promoción 2017 y que debíamos trabajar por ser mejores estudiantes CAPA (creativos, amorosos, pacíficos y autónomos).
En el 2016, hubo un nuevo cambio, llegó nuestra profesora Elvira, ella es una persona súper amorosa y paciente, continuamos trabajando los proyectos que habíamos iniciado en el cuidado de nuestro ambiente, así como también nuevos, por ejemplo en la adopción responsable de los animalitos para lo cual durante la campaña visitamos el Magazine de Panamericana Televisión con mi compañera Belén, allí invitamos a todas las personas a adoptar animales de manera responsable y no comprarlos en las calles, nuestra profesora solo que quedó un año pues era su último año dentro de Enseña Perú. Este 2017, llegó a nuestro salón el profesor Christian, a él lo conocimos cuando estábamos en tercero de primaria por un proyecto de matemática que organizaron en conjunto con la profesora Silvana, para poder concursar en la CONAMAT (Concurso Nacional de Matemática), en donde quedé en 16vo lugar a nivel sur. Lo que nos sorprendió fue que él estuviera trabajando un tercer año en Enseña Perú, pues sabíamos que todos solo podían quedarse como máximo dos años.
El profesor Christian es muy gracioso y nos enseña un montón en matemáticas, dentro de poco conoceremos el COAR de aquí de Arequipa y trabajaremos con los estudiantes de 4to de secundaria de ese colegio un proyecto para poder trabajar mejor en comunidad y ser más desenvueltos dentro y fuera de clases. Como este año somos promoción, estamos súper emocionados por terminar nuestra primaria, así que todas nuestras actividades las queremos hacer súper bien, nos estamos esforzando, hemos conocidos muchos sitios, muchas personas nos han venido a visitar, hemos tenido muchos problemas y también momentos de mucha alegría. Hoy converso mucho más con mis papás sobre lo que me ocurre y ellos están mucho más al pendiente de lo que hago, eso me gusta mucho. Y todo eso me hace estar más segura que mi sueño de ser ingeniero civil está cerca y claro, ser también la próxima presidenta del Perú, estoy segura que si tuviera la oportunidad yo no mentiría y buscaría ayudar a las personas que más lo necesitan.