Detrás de la capucha

Redactado por: Mario Tumba


En el fondo del salón, de primero de secundaria del colegio Nuestra Señora del Rosario en Ica, está sentado un estudiante con la capucha puesta. Detrás de la capucha se encuentra Mariano, un estudiante que en los últimos meses ha tenido un bajo rendimiento escolar. Frente a este reto, Renzo, docente participante del Programa de Liderazgo, intenta motivar al estudiante con ejercicios de matemática relacionados al fútbol, deporte que encanta a Mariano; pero parece no tener impacto.

Un día, el profesor Renzo quedó muy sorprendido  al preguntarle a la mamá de Mariano el por qué del comportamiento de su hijo. Ella le pidió apenada que le tuviera paciencia. Que su esposo había fallecido hace poco durante el cumpleaños de Mariano y que su hijo aún se encontraba afectado.

Pronto, Renzo buscó acercarse más a Mariano. Le dijo: “Si necesitas alguien con quien jugar o alguien con quien hablar. Tú dime, jamás te negaré algo”. Poco a poco, Mariano buscó intercambiar palabras. Al inicio de clase o en el receso eran los momentos de las conversaciones.

El sentirse escuchado ayudó mucho a Mariano, pues fue recuperando su motivación y sus ganas de participar en clase.

Ahora, se para frente al pizarrón a hallar el perímetro de la pelota, ya no se coloca la capucha durante la clase y ha aumentado su curiosidad por las clases. 

Aunque el dolor aún está en Mariano, recuperarse es más llevadero al encontrarse acompañado; pues tiene presente a su cariñosa madre, a sus amigos que a su forma tratan de entenderlo y a su profesor Renzo, al que de cariño llama “el profe chévere”.

Diana Escalante